“No me puedo quejar en cuanto a mi vida sexual, sólo que ahora que tengo diabetes, temo que no volverá a ser lo mismo”, dice Carlos, de 40 años. A otra paciente, Rosy, le preocupan los problemas relacionados con sus orgasmos. Si a usted le inquieta que la diabetes pueda afectar su capacidad de tener relaciones sexuales, hable con su médico.
Con diabetes o no, mucha gente tiene dificultades sexuales. Para quienes tienen diabetes, estos problemas pueden ser resultado de una complicación de la enfermedad. La buena noticia es que el tratamiento adecuado puede ayudarle a salir adelante, para que pueda gozar de una vida sexual sana.
Hable con su médico o equipo de cuidados. Puede que no sea fácil discutir el tema, pero su salud, incluyendo su salud sexual, es importante.